el año de la esperanza
"Fueron rápidamente y encontraron a María, a José, y al recién nacido acostado en el pesebre" (Lucas 2:16).
Al final de lo que puede ser el documento más importante del siglo XX, la enseñanza del Vaticano II sobre la Iglesia, la Santísima Virgen María es proclamada como signo de esperanza segura (Lumen gentium, 68). Oramos: "Dios te salve, Reina santa, Madre de Misericordia, vida nuestra, dulzura y esperanza nuestra. A ti clamamos, pobres hijos desterrados de Eva. A ti enviamos nuestros suspiros, lamentándonos y llorando en este valle de lágrimas". Sí, muchos de nosotros estamos en los valles y estamos experimentando el destierro debido a nuestros pecados. Por supuesto, Jesús es nuestra única Esperanza. Pero el Señor ha elegido a María para que sea parte del camino en que nos da esperanza. María nos muestra "el fruto bendito de su vientre, Jesús".
Hoy, una vez más, la Iglesia nos ha llamado a comenzar el año orando por la paz. María también nos ha llamado durante décadas a orar por la paz. No obstante, tal vez sintamos ganas de decir: "Mucho tiempo he convivido con los que odian la paz. Cuando yo hablo de paz, ellos declaran la guerra" (Sal 120:6-7). ¿Hay alguna esperanza de paz? María señala a Jesús, nuestra única Esperanza, y nos ordena: “Hagan todo lo que Él les diga” (Jn 2:5).
¿Hay alguna esperanza para detener el aborto, el hambre, el racismo, la guerra y otras atrocidades comunes? Por la fe, al lado de María, mira a Jesús, nuestra única Esperanza y la única Esperanza que necesitamos.
Oración: Padre, con mis ojos fijos en Tu Hijo Jesús, dame un nuevo año caracterizado por una esperanza invencible (ver Heb 12:2).
Promesa: "Pero cuando se cumplió el tiempo establecido, Dios envió a Su Hijo, nacido de una mujer y sujeto a la Ley, para redimir a los que estaban sometidos a la Ley y hacernos hijos adoptivos" (Gál 4:4-5).
Alabanza: "Porque el Todopoderoso ha hecho en mí grandes cosas: ¡Su Nombre es santo!" (Lc 1:49)
Referencia:
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de diciembre de 2025 al 31 de enero de 2026. Otorgado el 25 de junio de 2025. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, Ohio
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.
