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Martes, 27 de mayo de 2025

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san Agustín de Canterbury



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“Cuando Él venga, probará al mundo dónde está el pecado” (Juan 16:8).

   Dios creó el universo. Él sostiene el mundo entero en sus manos. Dios es grande. Él tiene grandes planes. Él quiere que todos se salven (1 Tim 2:4). Él nos ordena que hagamos discípulos de todos los pueblos (Mt 28:19). Él nos llama a vivir con Él en el cielo para siempre.

   Cada ser humano es muy pequeño. Cada uno de nosotros es como un punto microscópico en un planeta microscópico. Nuestras vidas duran menos de un segundo en comparación con la eternidad.

   El Espíritu Santo, Dios, viene a cambiar nuestra visión. A pesar de nuestra pequeñez fugaz, no pasará más nuestra vista a través de una mirilla causándonos visión de túnel, sino por una visión católica, universal y celestial. Que “busquen los bienes del cielo donde Cristo está sentado a la derecha de Dios” (Col 3:1). Que “tengan el pensamiento puesto en las cosas celestiales y no en las de la tierra” (Col 3:2).

   El Espíritu Santo nos abrirá los ojos para enterarnos que el pecado es mucho más que solamente el violar la ley. El pecado está en no haber creído en Jesús (Jn 16:9). El Espíritu Santo nos enseña que la justicia no es solo la muerte de Jesús en la cruz, sino también Su entronización en el cielo (ver Jn 16:10). Finalmente, el Espíritu Santo nos revela un mundo invisible de “principados y potestades contra los soberanos de este mundo de tinieblas, contra los espíritus del mal que habitan en el espacio” (Ef 6:12). El Espíritu nos revela que “el príncipe de este mundo ya ha sido condenado” (Jn 16:11).

   En el Espíritu Santo, abre tus ojos y observa la imagen completa. Mira a la Iglesia universal, al mundo entero, varios miles de millones de personas, cielo, y infierno. En el Espíritu Santo, no te encarceles en el presente, sino que mira hacia el misterio de la eternidad eterna.

Oración:  Padre, manda el Espíritu Santo de la verdad y luz. Que yo vea como Tu ves (ver Núm 24:4).

Promesa:  “Cree en el Señor Jesús y te salvarás, tu y toda tu familia” (Hch 16:31).

Alabanza:  San Agustín de Canterbury convirtió a muchos en Inglaterra a creer en Jesús a través de milagros y maravillas en el nombre de Jesús.

Referencia:  

Rescripto:  Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de abril de 2025 al 31 de mayo de 2025. Otorgado el 27 de noviembre de 2024. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, Ohio

El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.