< <  

Viernes, 8 de diciembre de 2017

  > >

La Inmaculada Concepción


Génesis 3:9-15, 20
Efesios 1:3-6, 11-12
Salmos 98:1-4
Lucas 1:26-38

Ver Lecturas en Inglés
Reflexiones Similares

la concepción de su encarnación

"El ángel Gabriel fue enviado por Dios...a una virgen...El nombre de la virgen era María" (Lucas 1:26, 27).

Alrededor de cuatro mil millones de personas hoy en día no creen que Jesús es Dios; lo ven como solo un hombre. Esta herejía, arianismo, ha sido común durante siglos. El hecho de que la Virgen María concibiera a Jesús sin relaciones sexuales indica que Jesús no era solo un hombre sino Dios. "Hijo del Altísimo" (Lc 1:32), "Hijo de Dios" (Lc 1:35).

Otras personas no creen que Jesús es un hombre. Ellos piensan que Dios aparentemente nació, fue crucificado y murió, esta herejía se llama Docetismo. El hecho de que María fue concebida sin pecado nos ayuda a comprender que María le dio su naturaleza humana a Jesús. De lo contrario, tendríamos que decir que María le dio su naturaleza humana a Jesús. Excepto el pecado. Esto abre la puerta para cuestionar si María dio algo de su naturaleza humana a Cristo, es decir, si Jesús es verdaderamente un ser humano. Debido a que María fue inmaculadamente concebida antes de que Jesús fuera concebido inmaculadamente, es más claro que Jesús recibió una naturaleza humana de María.

Debido a que Jesús es verdaderamente hombre, la naturaleza humana se ha transformado, podemos relacionarnos con Él de persona a persona y somos salvos por Su muerte sacrificial. ¡Jesús es Dios y Hombre! ¡Aleluya!

Oración:  Padre, gracias por el ministerio de nuestra Madre María, que revela la verdad de Jesús, su hijo.

Promesa:  "Él nos predestinó a ser sus hijos adoptivos por medio de Jesucristo, conforme al beneplácito de su voluntad, para alabanza de la gloria de su gracia, que nos dio en su Hijo muy querido" (Ef 1:5-6)

Alabanza:  ¡Aleluya! ¡Nosotros, con María, tenemos la victoria en Jesús!

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 25 de julio de 2017.

El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.