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Domingo, 10 de agosto de 2014

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19no domingo de Tiempo Ordinario


1 Reyes 19:9, 11-13
Romanos 9:1-5
Salmos 85:9-14
Mateo 14:22-33

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Reflexiones Similares

dios está susurrándote

"Después del terremoto, se encendió un fuego. Pero el Señor no estaba en el fuego. Después del fuego, se oyó el rumor de una brisa suave" (1 Reyes 19:12).

El Señor te está susurrando. Durante años, ha estado preparándote para oír su susurro. En él, descubrirás la mayor obra de tu vida. Miles de personas serán transformadas por el Señor, si oyes y actúas según su susurro. Debes prestar oído atento el susurro de Dios.

El Señor le susurró a Elías que él debía ungir a Jazael, Jehú y Eliseo (1 Re 19:15-16). Elías también debía hacer Eliseo su discípulo (1 Re 19:16). Así Elías ungió y tomó como discípulo a Eliseo (1 Re 19:19), quien, a su vez, ungió a Jazael (2 Re 8:7ss). Por otra parte, uno de los discípulos de Eliseo ungió a Jehú (2 Re 9:1ss). Estas tres unciones y el discipulado de Eliseo transformaron la nación de Israel purgándola de las abominaciones cometidas en el reinado de Acab.

El Señor también te está susurrando para hacer discípulos de tus hijos, ahijados y amigos. Jesús pasó todo su ministerio público haciendo discípulos. Él nos encargó hacer lo mismo (Mt 28:19). Así tanto ellos como nosotros "somos transfigurados a su propia imagen con un esplendor cada vez más glorioso, por la acción del Señor, que es Espíritu" (2 Co 3:18); transformados, transformamos al mundo. Estamos fortalecidos por el Espíritu para renovar la faz de la tierra (Sal 104:30). El Señor te está susurrando: "Discípulo, discípulo". Hazlo.

Oración:  Padre, limpia mis oídos limpiando mi corazón.

Promesa:  " Y Pedro, bajando de la barca, comenzó a caminar sobre el agua en dirección a Jesús" (Mt 14:29).

Alabanza:  ¡Aleluya! Hemos sido bautizados en la muerte y resurrección de Jesucristo (Rom 6:3 ss). ¡Aleluya!

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 23 de abril de 2014

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