fuera lo viejo, adentro lo nuevo
“Ahora es necesario que acaben... se despojaron del hombre viejo y de sus obras y se revistieron del hombre nuevo, aquel que avanza hacia el conocimiento perfecto, renovándose constantemente según la imagen de su Creador” (Colosenses 3:8, 9-10).
Las lecturas eucarísticas de hoy abordan dos formas de vida opuestas. San Pablo llama a estas dos formas el “hombre viejo” y el “hombre nuevo” (ver Col 3:9-10). El hombre viejo es nuestra vida sin Jesús, gobernada por el mundo, la carne y el diablo (ver 1 Jn 2:16). Este hombre viejo vive un estilo de vida caracterizado por la ira, la malicia, los insultos, la mentira, los malos deseos, la lujuria (Col 3:5, 8-9), los deseos de placer y las cosas de este mundo (Lc 6:24-26). El hombre nuevo se forma completamente al permitir que Jesús dé forma a nuestras acciones, pensamientos, palabras y estilo de vida. Cuando vivimos en el hombre nuevo, somos liberados del pecado y somos libres para el servicio, la adoración y la evangelización.
Los que viven según el hombre nuevo son bendecidos; los que viven bajo el hombre viejo no tienen nada que esperar sino desgracias (ver Lc 6:20-26). En el Bautismo, nuestro hombre viejo murió con Cristo, ahogado en las aguas del Bautismo. Sin embargo, nuestra vida después del Bautismo a veces parece una guerra civil (ver Stg 4:1). Queremos vivir una vida buena y santa para el Señor, pero pecamos (ver Rom 7:7-25).
La clave es vivir diariamente nuestro Bautismo. Cada vez que se bendiga con agua bendita, es decir, el agua del Bautismo, renueva tus votos bautismales y ore: “¡Soy un hijo bautizado de Dios Todopoderoso! Señor Jesús, ahoga mi hombre viejo contigo en esta agua bendita. Ayúdame a revestirme de las vestiduras puras y victoriosas de mi hombre nuevo que vive en Ti. Que pueda vivir la nueva vida de bendiciones y no la antigua vida de desgracias”.
Oración: Padre, “Yo estoy crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí” (Gál 2:19-20).
Promesa: “Busquen los bienes del cielo donde Cristo está sentado a la derecha de Dios” (Col 3:1).
Alabanza: Lisa tomó la decisión de alabar a Dios todos los días en todas las circunstancias.
Referencia: (Esta enseñanza fue presentada por un miembro del equipo editorial).
Rescripto: Según el Código de Derecho Canónico, se otorga el Nihil Obstat (no existe impedimento para publicar) a Un Pan, Un Cuerpo por el periodo 1 de agosto al 2025 30 de septiembre de 2025. Otorgado el 8 de enero de 2025. Reverendo Steve J. Angi, Canciller y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, Ohio
El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.