San Juan de Letrán fue una de las primeras parroquias. Durante los primeros trescientos años de cristianismo, no se tenía el concepto de una parroquia puesto que los cristianos se reunían en sus hogares para el culto, la enseñanza y la Comunión (Rom 16:4-5). Tal como los individuos cristianos necesitan una comunidad donde congregarse con otros cristianos, las comunidades eclesiales de base encontraban apoyo al unirse con otras comunidades.

Quizás por la persecución o tal vez frente a la falta de un edificio suficientemente grande, se hizo difícil juntar las comunidades eclesiales en una asamblea regularmente. Una vez se redujo la persecución, el Espíritu Santo inspiró a las comunidades de Roma a que construyeran un edificio donde se pudiera reunir la "comunidad de comunidades". Y esta fue la iglesia de san Juan de Letrán. De esta experiencia aprendemos que:

• Que el hogar puede ser una iglesia doméstica.

• Las comunidades de base son parte de una iglesia más amplia y universal.

• La iglesia no es principalmente una institución sino una comunidad de comunidades, una familia de familias.

• La iglesia debe ser una, es decir, unida (Ef 4:4).

• El Señor da líderes a la iglesia para promover nuestra unidad a través del uso de su autoridad.

Porque el día de la fiesta de hoy nos habla de la Iglesia, nos habla del plan Divino de salvación, de lo que significa la vida, y de cómo ser feliz y agradable a Dios. Aprende de la Iglesia, sé como la Iglesia y ama la Iglesia (Ef 5:25).

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 5 de junio de 2013

El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.