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Sábado 31 de agosto de 2013

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1Tesalonicenses 4,9-11
Salmos 98,1, 7-9
Mateo 25,14-30

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Reflexiones Similares

los talentos y el dia del juicio final

"Después de un largo tiempo, llego el señor y arregló las cuentas con sus servidores" (Mateo 25,19).

El día del Juicio Final será un asunto de mayordomía. Dios es el dueño de todo (Sal 24, I) incluso de nosotros mismos (1Cor 6,19) (Gal 2,20) nosotros somos sus administradores. La mayordomía es más que un trabajo a tiempo completo; es un trabajo de veinticuatro horas al día, cada día. Es vivir nuestra vida totalmente en Cristo.

La administración como mayordomo significa no solo manejar las cuentas y posesiones sino también el tiempo, la energía, las oportunidades, talentos, regalos del Espíritu Santo, etc. Por ejemplo, el Señor espera que nosotros seamos buenos lectores de este libro, "Un pan, un Cuerpo". Cualquier mensaje de las escrituras que, al recibirlo nos ilumine, deberemos obligadamente ponerlo al servicio de otros para que los ilumine también (Lc 8,16). Además, cuando vamos a misa y recibimos la comunión, debemos ser tabernáculos que llevan a Jesús sacramentado a aquellos que desesperadamente tienen necesidad de Él y no lo saben. Debemos dar como regalo lo que se nos ha dado a nosotros gratis (Mt 10,8). "A quien mucho se le da, también se le pedirá mucho; a quien mucho se le confía, se le exigirá mucho más" (Lc 12,48). Sé un siervo bueno y fiel (Mt 25,21) Ama a Dios y comparte ese amor. Prepárate para el Juicio final. "Ven y alégrate conmigo" (Mt 25,21)

Oración:  Padre, haz que nunca gaste dinero inútilmente, posesiones, tiempo, talentos y oportunidades y que nunca las esconda solo para mí.

Promesa:  "Dios mismo les ha enseñado a amarse unos a los otros" (1Tes 4,9).

Alabanza:  Juana, madre de ocho criaturas y muy ocupada, con gran entusiasmo comparte y recibe con su grupo espiritual de oración, ideas y enseñanzas.

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 5 de mayo de 2013

El Nihil Obstat establece que no existe impedimento para la publicación de un libro o folleto. No implica acuerdo con contenido, opiniones o afirmaciones expresadas en el mismo.