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Jueves, 8 de marzo de 2018

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san Juan de Dios


Jeremías 7:23-28
Salmos 95:1-2, 6- 9
Lucas 11:14-23

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demonios derrotados

"Pero si yo expulso a los demonios con la fuerza del dedo de Dios, quiere decir que el Reino de Dios ha llegado a ustedes" (Lucas 11:20).

En Cuaresma, imitamos a Jesús cuando ayunó cuarenta días y venció las tentaciones de Satanás (Mt 4:2ss). Algunos demonios no pueden ser expulsados ​​excepto por la oración y el ayuno (Mt 17:21). "La oración y el ayuno son las primeras y más eficaces armas contra las fuerzas del mal" (El Evangelio de la Vida, Papa san Juan Pablo II, 100).

En la lectura del Evangelio de hoy, escuchamos acerca de Jesús "expulsando a un demonio" (Lc 11:14) y mostrando que Él es más fuerte que el hombre fuerte, Satanás (Lc 11:22). Al igual que en el Evangelio, Jesús está expulsando demonios ahora mismo, pero esto es solo el comienzo. Al final de nuestro ayuno de cuarenta días, Jesús ha planeado una derrota mundial de demonios cuando cientos de millones de católicos proclaman su fe y rechazan a Satanás, todas sus obras y todas sus promesas vacías. Este tiempo de Pascua, Dios Padre planea manifestar que "en cuanto a los Principados y Potestades los despojó y los expuso públicamente a la burla, incorporándolos a su cortejo triunfal" (Col 2:15).

Sé fiel en tu oración de Cuaresma y en ayuno. Satanás y sus demonios están temblando y convulsionando en la medida en que la Iglesia ejerce la autoridad dada por Jesús. La derrota está en marcha. Ayunen con fe.

Oración:  Padre, que pueda mirar la Cuaresma como Tú la ves.

Promesa:  "Sigan por el camino que Yo les ordeno, a fin de que les vaya bien" (Jer 7:23).

Alabanza:  San Juan de Dios dejó la vida de militar para ministrar a los enfermos y necesitados.

Rescripto:  †Reverendísimo Joseph R. Binzer, Obispo auxiliar y Vicario general de la Arquidiócesis de Cincinnati, 29 de noviembre de 2017.

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